Terminamos este florido menú con una tarta que se toma bien todo el año pero con las temperaturas disparadas es un fresco bocado.
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Tarta fresca de chocolate
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TARTA FRESCA DE CHOCOLATE
50 gr de mantequilla
80 gr de galletas digestive (o tipo María)
4 o 5 nueces
125 gr de chocolate negro postres
400 ml de leche
100 gr de nata para montar
1 sobre de cuajada en polvo
20 gr de azúcar
Para un molde desmontable de 17 cm.
Poner papel de horno en el fondo del molde de modo que quede prendido con la pared lateral (se pone una hoja de papel sobre la base, se coloca el aro que forma la pared del molde y se cierra. El papel sobrante se recorta). Colocamos un aro de acetato en el interior del molde para que no se pegue a las paredes.
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A lo largo de los paseos color y color |
Trituramos las galletas con las nueces. Le añadimos la mantequilla fundida. Hacemos una pasta y la depositamos en el fondo del molde.
Con una cuchara vamos pisando para dejar la base lo más regular posible. Dejamos en la nevera para que compacte.
Calentar 300 ml de leche con la nata, el azúcar y el chocolate troceado. Revolver continuamente hasta que se haya fundido.
Diluir el sobre de cuajada en la leche restante y añadir a cazo. Dejar cocer a fuego lento y revolviendo continuamente unos seis minutos procurando que quede una pasta bien homogénea.
Volcar en el molde dejando caer la mezcla sobre el dorso de una cuchara para evitar que levante el fondo.
Dejar en la nevera unas cuatro horas para que cuaje.
Para desmoldar retirar el lateral del molde. Retirar con cuidado el acetato. Con ayuda de una espátula pasar la tarta a fuente adecuada.
Se puede adornar con nata montada y chocolate rallado.